El alcalde de la ciudad de Washington, DC, Vincent Gray, dijo hoy que al menos 12 personas fallecieron en el tiroteo registrado en unas instalaciones de la Marina en la capital estadounidense.

En una rueda de prensa, indicó que hasta el momento, con la información disponible, "no hay ninguna razón" para pensar que el tiroteo, en el que pudieron participar hasta tres personas, fue un ataque terrorista.

A eso del medidodía, las autoridades habían contabilizado siete personas muertas y otras cinco con heridas tras el tiroteo.

Los hechos aún se están investigando, dijo el funcionario que habló bajo condición de anonimato.

La jefa de la policía de la capital estadounidense, Cathy Lainer, confirmó la muerte del presunto atacante, al que no identificó, en una improvisada rueda de prensa en las inmediaciones del complejo naval donde se produjo el ataque a primera hora de la mañana local.

Según indicó, la “principal preocupación” en estos momentos entre los agentes desplegados en la zona acordonada es que “tenemos potencialmente a otros dos agresores que no han sido localizados hasta el momento”.

Lainer también confirmó que hay “múltiples” víctimas mortales en el edificio donde se perpetró el ataque, pero no precisó su cifra, otra de las grandes incógnitas a varias horas del comienzo del ataque, cuyos motivos también se ignoran.

Un portavoz naval local había hablado en Twitter de cuatro muertos, aunque la Marina todavía no ha precisado de forma oficial esa cifra en los comunicados que emite regularmente desde el inicio del ataque.

Además del agresor abatido, al menos hay sin embargo otra víctima mortal más, que fue confirmada por un portavoz del hospital de la Universidad George Washington de la capital.

El tiroteo comenzó a las 8:20 a.m. hora local (12:20 GMT) en el cuartel general del Comando Naval de Sistemas Marítimos, en Washington, situado en el Navy Yard, un complejo naval en el sureste de la ciudad, a escasos kilómetros de la Casa Blanca y el Capitolio.

La policía y los equipos especiales han acordonado el área, donde también han sido cerradas varias escuelas, entre otros.

El aeropuerto Ronald Reagan de la capital estadounidense suspendió temporalmente sus vuelos, aunque ya ha reiniciado sus actividades normales. En total, 30 vuelos se vieron afectados por la medida.

En el lugar de los disparos trabajan unas 3 mil personas. Nada más iniciarse el ataque, se emitió una orden para que todas busquen refugio a causa de un “tirador activo”.

Una trabajadora en el lugar entrevistada por la cadena CNN relató a la emisora cómo sonó una alarma de fuego, se anunció que había una “emergencia” en el edificio y luego varios funcionarios empezaron a ordenarles que salieran del edificio.

El puesto de control es uno de los cinco que mantiene la Marina en todo el país, encargados de diseñar, construir y mantener los buques y submarinos militares estadounidenses, así como sus sistemas de combate.

OBAMA CONDENA ‘ACTO COBARDE’

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, condenó hoy, lunes, el tiroteo en las instalaciones navales del Mando de Sistemas Navales, en Washington, D. C., que describió como “un acto cobarde” y pidió que sus autores sean llevados ante la Justicia.

“Sabemos que numerosas personas resultaron heridas y algunas han muerto”, añadió sin dar detalles, porque, dijo, no se conocen “todavía todos los hechos”.

Obama habló así al principio de una comparecencia ante los medios en la Casa Blanca, que está situada a 8 kilómetros del lugar de los hechos, convocada para hacer balance de la marcha de la economía estadounidense.